En el verano las empresas ven como decae la productividad y rendimiento de su actividad. La motivación, actitud y implicación de la mayoría de los trabajadores comienza a desgastarse con las altas temperaturas y las ganas de vacaciones. La baja productividad durante los meses de verano no es un mito, es la realidad. La depresión veraniega afecta a los resultados, el tiempo de dedicación, el ausentismo y la concentración.
Muchas organizaciones se conforman y esperan a que llegue el otoño para remontar su actividad, pero… ¿Podemos hacer algo para evitar que la productividad de la empresa no decaiga tanto en julio y agosto?
Estos son los 6 consejos para mantener a tus empleados motivados y comprometidos con el trabajo durante los meses de verano.
Establecer objetivos a corto plazo: Fija objetivos inmediatos, asumibles en poco tiempo. De esta manera los empleados se marcarán sus propias metas en verano (diarias, semanales, mensuales) y aumentará su motivación. Se trata de desterrar el mito que en verano no se trabaja nada.
Horario intensivo: Ofrecer la posibilidad de compactar las horas de trabajo en jornadas más cortas para adelantar la hora de salida al mediodía. Es una manera de ayudar también a la conciliación familiar, ya que son los meses en que los niños ya no van a la escuela.
Trabajo desde casa: Valorar si hay alguna tarea que los trabajadores pueden realizar desde casa y así evitar el desplazamiento a la oficina. La tecnología ofrece ya muchas alternativas de comunicación (vídeo llamada, email, mensajería instantánea, etc) que no requieren la presencia del trabajador en la oficina para el correcto desarrollo de los proyectos. Piensa más en objetivos que en horas.
Flexibilizar los plazos de vacaciones: Otra manera de mejorar la productividad durante el verano es ampliar el periodo en que los empleados pueden solicitar sus vacaciones. Muchas empresas se ciñen únicamente al mes de agosto y quizás puede ser favorable espaciar las vacaciones durante todo el año. Muchos trabajadores agradecen esta flexibilidad y la posibilidad para viajar fuera de temporada alta.
Tiempo para formase: Aprovechar la pausa del verano para reforzar conocimientos, especializarse o reciclar los conocimientos es una buena opción. Ofrece a los empleados un programa completo de cursos online, capsulas formativas, lecturas recomendadas, etc. También se puede contactar previamente con universidades o escuelas de negocios para ofrecer ofertas exclusivas para tus empleados.
Motivación, recompensas e incentivos: Los grandes eventos suelen darse a finales de año. Las recompensas, incentivos y ventajas pueden ser muy efectivas a mitad de año para aumentar la productividad y resultados. Se pueden llevar a cabo revisiones de trabajo, feedbacks y detección de puntos de mejora con cada uno de los empleados. Prepara un programa de recompensa estratégico para trabajadores que responda a sus objetivos y aspiraciones. ¡Es una buena manera de agradecer el trabajo bien hecho!